Más de lo que puedo contar.
“A mí…me fue dada esta gracia de anunciar…las inescrutables riquezas de Cristo.” (Efesios 3:8)

UN HOMBRE sumamente rico estaba siendo entrevistado para un artículo en una revista. Estaban hablando de la cantidad de sus inmensas posesiones en la industria y en el comercio. Finalmente, el periodista le preguntó: “Nos gustaría saber esto: ¿cuánto vale usted en total?” El periodista pareció sorprendido cuando el hombre le respondió: “No tengo ni idea. Sólo sé que es más de lo que puedo contar.” Estuve pensando en esta declaración. Parece una situación en la que yo nunca me encontraré. ¡Imagínate tener más dinero del que puedes contar! Entonces pensé: A un nivel espiritual, esto sí se aplica a mí. Escribiendo a los creyentes en Éfeso, Pablo habló de “las inescrutables riquezas de Cristo” (3:8). Nuestra riqueza espiritual es tan inmensa que no puede ser medida. La palabra “inescrutable” significa literalmente “aquello que no puede ser escrutado”. Aparece en otro lugar en el Nuevo Testamento, en Romanos 11:33. En este caso, Pablo empleó el término para describir los juicios de Dios, que están mucho más allá de nuestra comprensión. ¿Te sientes pobre? ¿Sin recursos? ¿Te parece que a todos los demás les va mejor que a ti? Entonces lee otra vez Efesios 3:8. ¡Eres rico! Tienes acceso a las insondables, inagotables y eternas riquezas de Dios. Puedes decir acerca de tus riquezas en Cristo: “¡Tengo más de lo que puedo contar!” Esta es una gran verdad: “Somos ricos por lo que tenemos en Cristo, no por lo que tenemos en el banco.”